LA SEÑORA

jueves, 20 de septiembre de 2007




Para los de Caborana no hay mas Señora que Doña Luz, la maestra. Y el pequeño homenaje a la escuela de la Señora no tiene nada que ver con que al día de hoy sea capaz de demostrar el Teorema de los Portales ( el que prohibía hacerlo a escondidas en ellos y llevaba el nombre de un griegu raru , con hache intercalá ) o que pueda enunciar las series logarítmicas que luego fueron las bases de las reglas de cálculo y hoy vienen incorporadas en los coprocesadores matemáticos de las modernas calculadoras. No. Eso es intrascendente. Puedo acordarme yo, y tu, que estabas sentado a mi lado en el banco de la escuela, no. Y también es cierta la viceversa. La enseñanza que yo recuerdo de aquella escuela fue la que la convirtió en singular, la que permanece en el recuerdo y la que sigue teniendo toda su validez pasado medio siglo . Mucho tiempo después de abandonar la primaria me enteré de que lo que la Señora impartía era la base de la Escuela Moderna, es decir :

  • - La instrucción comprendía, junto a la formación de la inteligencia, el desarrollo del carácter y la cultura de la voluntad
  • - Los programas y los métodos estaban adaptados, lo más posible, a la psicología de cada guaje
  • - El respeto a la inteligencia y a la libertad del crío, declarando que el buen maestro era capaz de prescindir de sus propias ideas de adulto.
  • - Los guajes, todos los que se le confiaban, deberían llegar a ser personas instruidas, sanas, justas y libres de todo prejuicio
  • - Todos los niños de ambos sexos deberían tener idéntica educación desde la infancia
  • - Se sustituía el estudio dogmático por el razonado

Y todo eso, traducido a nuestra escala, en nuestra escuela era, mas o menos , esto :

RESPETO ENTRE NOSOTROS : La escuela era un local en los bajos de una edificación en la Carretera, al lado de la fuente Viaonga. Tenía planta rectangular y solo dos puertas, una en cada fachada, y tres ventanas, dos a la carretera y una al camino lateral, sin distribución interior alguna, por lo que la satisfacción de cualquier necesidad fisiológica se hacía en la putacalle. Y ahí salíamos unos y otras y nunca hubo, que se sepa, ningún acto desagradable por parte de ninguna o ninguno. ¡¡¡Respeto !!! . Como la Señora vivía justo encima de la escuela, dejaba ir a las chicas mayores a aliviarse al servicio de su propia casa. Los demás, en los improvisados y naturales mingitorios puntacontraelmuro de la reguera de Sinariego ( ¡Qué guapos yeren los furacos con anillu amarillu perfectu que dexaba´l mexu al entrar na nieve! )……. Y respeto, también, cuando ya no podías mas y le decías a la compañera :

  • Rosina , qué guapina yes . ¿Déjesme date un besu? .

Y a mí, reconózcolo, nunca me dejaron dar ninguno, pero nadie se enfocicó conmigo después de tan osada pretensión. Una colega de la escuela , para mi de las mas guapas ( de las que siempre me lo había negado , por supuesto ), muchos años después, en un chigre en El Raval de Barcelona, comentando el asunto, me explicó la teoría que ella tenía al respecto :

  • " A la muyer hay que pedíyilo , porque aunque nun te lo dé , ye seguro que te lo agradez ".

Yel dia de hoy , que sé que se arrepiente de habérmelo negado y que ella sabe que su original agradecimiento a mí de poco me sirvió ........






CONTINUARÁ


5 comentarios:

Anónimo dijo...

Exilieu, sacame de la duda que tengo, pues estes coses quedenme muy lexos.
Yo fui a les escueles nacionales que habia en la casael pueblu a principiu de los 30s, habia dos maestros, despues tuve nos frailes.
Lo que nun me acuerdo ye si la Sra. Luz y su escuela sustituyó a la de la casael pueblu como escuela nacional o trabayó por su cuenta.
Si ye asina la escuela de la casa el pueblu siguiola la de Don Jose Canal xunto a la carretera?.

Anónimo dijo...

Espera..espera...

Nun vayas tan patrás....al menos de momentu.

La Escuela de Don José Canal y la de la Señora coexistieron. Una na carretera al llau la carnicería de los Delrío y la otra mas abaxo al llau la fuente Viaonga....Jeje, curioso, les dos al mesmu llau la carretera...¿?....los frailes y les monxes, de la parte llá. Y nun digo na, o pueo decir que yo nun fuí el responsable de l´ubicación. Ye que la naturaleza ye mui sabia....

Anónimo dijo...

De las Escuelas de la casa del pueblo recuerdo el nombre de un maestro de los que pasaron llamado Celso.
Durante la guerra creo que la enseñanza se impartía en La Salle y Las Dominicas.
Los chavaletes teníamos que marchar a quitar el hambre a cambio de trabajo a pueblos con recursos agrarios, fuesen de Castilla o de la Asturias.

Anónimo dijo...

También yo tengo muy buenos recuerdos de la primera maestra que tuve.La llamábamos LA TACONINOS porque de no ser por ellos, cualquier chavalín de 10 o 12 años era más alto que ella.Sin embargo, su talla como persona , me doy cuenta ahora, era muy grande.
Todos los días teníamos que llevar el banco para poder sentarnos.Un día me atrapó metiendo el dedo por el agujero del banco de la compañera de al lado .A partir de entonces, todos los bancos iban acompañados del correspondiente corcho.De esta forma, quedó zanjado ese desagradable y pecaminoso asunto.

Anónimo dijo...

Gallu:

Un poco calentucu ...eh?. Ya teníes madera de guaje.