¿DE POSTRE?....... YO, FRIXUELOS

domingo, 22 de febrero de 2009


Ay, mare de deu, ¡oh, el carnaval!. Yo siempre pensé que era una especie de filosofía propia y a la vez, de forma colectiva, del pueblo, que les son dadas, a ambos, a expresarla en un solo día. Día trepidante, de bullicio y placer espontaneo. Mundo, Demonio y Carne traídos a escena ante un espectador reducido y controlador del poder político y religioso, al que por cierto no le eran nada gratos. Carne, Demonio y Mundo, que no había que ir a buscarlos muy allá ya que habitan entre nosotros. Pero, mare de deu, otra vez, pasados unos años de democracia, me cuelo entre bastidores y, nada del mundo al revés, nada de improvisación incontrolada, nada de eso, el poder reparte papeles, diálogos y disfraces, así que todo se queda en un acto festivo oficial mas. Allí donde se celebra majestuosamente, incluso como fiesta local laboral, se malinterpreta el evento y todo se reduce a desfiles multitudinarios radiodirigidos – orden, mucho orden – con charangas, venidas de no se sabe donde, que se empeñan en imitar, a base de golpes cansinos y repetitivos de percusión y de silbato, ritmos brasileiros, para que por un momento pensemos todos al unísono que la Calle Pelayo y la Adosinda – pobres, si levantaran la cabeza – son nuestro sambódromo particular.

Llegados a ese punto, me da que la fiesta carnavalesca está en un momento crítico, como si perteneciera a un pasado ya irrecuperable e incapaz de resucitar. Y ya se sabe, los cadáveres apestan.

Las imágenes que siguen valen mas que todas las explicaciones. Solo habría que recordar a los Entes Públicos organizadores, sufragadores del gasto y repartidores de los guiones de cada cual, que:


La fiesta y´ un azúcar d´algodón,

que hay que palpalu, lamelu, fisgalu,

tos con idéntica fruición


Y, nun nos val,

enteraivos,

l´azucar en terrones,

standariceu



Fotos del carnaval 2008 de Xixón.
¿Tradición?. ¿De ónde?













Pero, que no cunda el pánico. Nos quedan los frixuelos. Un poco de harina, leche, huevos y sartén para freir. Vuelta y vuelta. Finos, muy finos. Endulzados al gusto, con azúcar o miel de tilo. Quizás no lo recordéis, pero Pedro el hermano de Toño La Campa, el de los Cuarteles, furtió muy joven para Francia y allí pasó a llamarse, cosas del chauvinismo francés, Pierre Lacamp, alcanzando gran fama como director de la revista La Cousine Francaise. Junto con el catalán Inaci Domenech publicaron muchos artículos acerca de los frixuelos, a los que empezaron a llamarles creps. Anda, que Pedro pasara a llamarse Pierre, se comprende. Que La Campa, su apellido, se convirtiera el Lacamp, también. Pero, para llegar de frixuelu a creps tuvieron que estropear muchos en su sartén y echar ladedios de cagonmimantos en asturiano y en catalán. Así, que, por si acaso, seguir mi consejo: solo vuelta y vuelta. Venga,... a ello.




BIBLIOGRAFIA DE CONSULTA




2 comentarios:

Anónimo dijo...

Pa frisuelos, sin desmerecer al Pierre esi de los cojones, los de Nisia

Anónimo dijo...

Cocina de carbón, sartén de acero, aceite de granel, güevos de casa, harina de molido manual, azucar de caña,...y necesidad de sacar el máximo número de frisuelos, constituyen el misterio del éxito